* El Centro de Tratamiento de Residuos Industriales (CTRI) no peligrosos no podrá quemar ni metales ni PVC. Así lo establece una de las medidas correctoras impuestas por la Junta.
La Junta de Castilla y León, a través de la Consejería de Medio Ambiente, ha concedido la Declaración de Impacto Ambiental favorable al Centro de Tratamiento de Residuos Industriales (CTRI) no peligrosos que se ubicará en Ampudia, después de estudiar las alegaciones presentadas durante el período de Evaluación de Impacto Ambiental.
Una declaración con la que se da un paso importante para la puesta en marcha de las obras de este Centro, aunque todavía la Junta tendrá que otorgar la Autorización Ambiental Integrada, y las Cortes habrán de declarar de Interés Regional este proyecto.
En cualquier caso, la Declaración de Impacto Ambiental de este proyecto, marca una serie de medidas correctoras para evitar la afección medioambiental del mismo. En concreto, y divididos en las diferentes fases de ejecución del centro: proyecto (2), construcción (22), explotación (24) y abandono de las instalaciones (2) después de los 30 años que tendrá, aproximadamente, de vigencia.
En la fase de explotación se hace especial hincapié en la valorización energética de algunos desechos, esto es, la incineración de parte de los desperdicios que no puedan ser valorizados, máxima preocupación de algunos de los colectivos opositores.
El proyecto establece que se quemarán residuos no peligrosos que, debido a su composición y estado de agregación, no se puedan clasificar ni reciclar y que tengan un alto poder calorífico o contenido energético. Se aprovechará para producir electricidad. Su capacidad de tratamiento de esta unidad será de 41.000 t/año en una primera fase, alcanzando las 76.000 t/año en una segunda fase.
Sin embargo, una de las medidas correctoras, señala que deberá garantizarse la ausencia de PVC, estableciendo un sistema de separación de este material previo a la entrada del combustible en la unidad de valorización energética, así como un sistema de control de que la separación ha sido efectiva. Una medida vinculada a una de las alegaciones presentadas. Asimismo se garantizará la ausencia de metales en los residuos.
De igual forma, deberán llevarse a cabo mediciones periódicas sobre la calidad del aire y en el caso de que se sobrepasaran los niveles establecidos se deberá dar aviso a Medio Ambiente.
Accesos e impermeabilización. También se fijan las medidas de impermeabilización de los terrenos donde se ubicará el centro, y en especial el vaso de rechazos, «instalación que tienen todos los Centros de Tratamientos de Europa y a la que van los desperdicios que, de ninguna manera, se pueden reciclar o recuperar», señaló el delegado de la Junta de Castilla y León, José María Hernández, que pidió que quien quiera hablar del proyecto «que por favor se lea el Bocyl, porque ahí se ve lo que se hará. Ni más ni menos».
La impermeabilización del vertedero se realizará tal y como propuso la empresa, por tanto la Junta estima que no habrá que modificar estas condiciones, pese a las alegaciones presentadas.
En cuanto a los accesos, se señalan cuatro rutas principales de aproximación al centro, ubicado en Ampudia: desde Dueñas por la P-903 y P-901; desde Palencia capital, por la circunvalación de la N-610 y CL-612 hasta Torremormojón y P-921, y desde Valladolid bien por la VA-900 y P-904 o circunvalando por Palencia. «En la medida posible, se evitará la aproximación desde Valladolid por Cigales por la VP-4401 y PP-9011, para evitar el paso por los núcleos urbanos de Cigales y de Ampudia».
ALEGACIONES
Tramitación. Algunas señalan que falta la designación del responsable del proyecto y la compatibilidad urbanística.
Gestión de residuos. En relación al vertedero, indican que está sobredimensionado. Respecto a la valorización energética, expresan preocupación por la afección a la calidad del aire, los equipos de medición y el elevado porcentaje de residuos que destinan a este tipo de valorización en vez de hacerlo por otros medios.
Fuente: Diario Palentino Digital